BRUSELAS.- La atleta paralímpica belga Marieke Vervoort ha decidido someterse a la eutanasia debido a que padece una enfermedad degenerativa que le provoca dolores intensos. La decisión la tomó antes de los Juegos Paralímpicos de Río 2016, donde planteó serían sus últimas dos competencias.
A la edad de 20 años de edad una enfermedad incurable y degenerativa obligó a Vervoort a permanecer para siempre en una silla de ruedas y ese padecimiento ha empeorado su calidad de vida con el paso del tiempo.
Por lo anterior, Marieke ha decidido que los Juegos Olímpicos de Río serán su último reto deportivo, la última meta en su vida.
La atleta belga de 37 años, ya firmó los documentos necesarios, y escogió incluso el sitio donde quiere que sus cenizas sean esparcidas, aunque le falta elegir la fecha en que morirá.
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Su último objetivo es sumar al menos otra medalla cuando compita en Río de Janeiro como velocista en silla de ruedas en las pruebas de 100 y 400 metros, que se realizarán entre el 7 y el 18 de septiembre.
De ganar, en las competencias alcanzará tres medallas olímpicas, la última de ellas de oro, obtenida en los 100 metros lisos y plata en los 200 y 400 metros lisos en los Juegos de Londres, en 2012, con récord paralímpico en 400, 800, 1.500 y 5.000 metros.
"Todo el mundo me ve reír con mi medalla de oro, pero nadie ve el lado oscuro", aseguró Vervoort en una entrevista que concedió a Le Parisien.
La deportista asegura que los dolores que siente se han multiplicado en las últimas fechas y sus limitaciones son cada vez mayores.
Por lo que hay noches que apenas consigue dormir más de diez minutos seguidos y, en ocasiones, se ha desplomado por el cansancio del el día, incluso a veces tiene que tomar morfina incluso durante los entrenamientos. Su perro Zenn ha sido quien en ocasiones la reanima a lenguetazos.
“Bélgica es un país vanguardista en materia de eutanasia, pero para que Marieke hiciera válido su derecho a morir, tuvo que convencer a un psiquiatra de que su decisión no respondía a un estado de ánimo puntual y probar a tres médicos diferentes que los dolores que siente son tan intensos que no puede vivir con ellos y no hay ninguna esperanza de mejorar”, aseguró por su parte el diario El País.
A partir de 2002, la ley belga autoriza la eutanasia para los casos de “pacientes que se encuentran en una situación médica sin salida y de sufrimiento físico o psíquico constante e insoportable que no puede aliviarse y que es el resultado de una afección accidental o patológica grave e incurable”.
En 2014, la Cámara baja del Parlamento belga aprobó una iniciativa que extiende el derecho a la eutanasia a los menores de edad, convirtiéndose en uno de los países más vanguardistas en este procedimiento.
Se estima que entre 2002 y 2013, las cifras de eutanasia crecieron en un 500 por ciento en el país europeo.
Con información de Notimex
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