En la búsqueda por ofrecer alternativas diferentes para hacer ejercicio se han desarrollado disciplinas novedosas que incluso combinan varias prácticas, con la intención de hacer más atractivo y agradable el ejercitarse, más allá de ir a entrenar a un gimnasio con pesas.
Fue así como nació en 1959 lo que ahora conocemos como Body Barré, un entrenamiento creado por la bailarina de ballet alemana Jackie Bouffier, quien ideó una rutina de ejercicio que mezcla los principios de danza, pilates y yoga.
Según cuenta la historia, luego de haber sufrido una lesión en la espalda por el ballet que practicaba en Reino Unido, Jackie combinó su entrenamiento habitual con terapia de rehabilitación. Fue así que desarrolló esta nueva disciplina y abrió su primer salón en el sótano de su domicilio en Londres.
Fue así como nació este workout, que después fue llevado a los Estados Unidos por Lydia Bach, quien montó un estudio en Nueva York y comenzó a popularizarse por todo el país.
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La práctica
A lo largo de una clase de barré se realizan una serie de ejercicios isométricos, que son aquellos en los que se busca tensar los músculos, a través de posturas delicadas que no pongan en peligro a las articulaciones o músculos, como podría suceder con las pesas o barras de gimnasio.
Además, se complementan con ejercicios isotónicos, que son aquellos en los que sí se realizan movimientos para trabajar los músculos. Se complementa con una rutina de cardio y estiramiento que favorece la flexibilidad en tu cuerpo.
A lo largo de la clase, además del propio peso corporal, se complementa la rutina con material de apoyo, como son mancuernas de bajo peso, ligas de resistencia, tapete o mat de yoga y la barra de ballet, aunque también se puede realizar sin ellos o sustituir por muebles u objetos que tenemos en casa.
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Resultados
Quienes han probado las rutinas de body barré reconocen el impacto positivo que tiene la clase en su cuerpo. Se estima que al mes los resultados son visibles, pues con esta práctica, acompañada de buenos hábitos alimenticios, se logra bajar de peso, quemar grasa, tonificar músculos, aumentar la flexibilidad y reducir los niveles de estrés al estimular la producción de endorfinas, que ayudan a combatir la tensión y ansiedad. Así que hasta te ayuda a ahorrarte la terapia.
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Como resultado de los beneficios que aporta este entrenamiento, destaca la corrección de la postura, con estiramientos y posiciones que ayudan a alinear la posición de la columna (ideal para quienes pasan horas sentados frente a una computadora); fortalecimiento de los músculos de todo el cuerpo (brazos, muslos, abdomen, espalda); aumento de flexibilidad (no olvidemos que tiene como base la danza y el ballet) y aumento de resistencia y concentración.
En resumen, body barré es un ejercicio eficaz, integral y de bajo impacto que, en conjunto, gracias a la combinación de disciplinas, logra esculpir el cuerpo.
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Dónde practicar
En Ciudad de México existen estudios dedicados a impartir esta disciplina. Entre los más famosos, de mayor reconocimiento y concurrencia destacan:
Barre By Pau
Barre Mx
The Dailey Method
Barre Loft
Body Barre by Jo Studio