Aunque el interés siempre ha existido, los prejuicios y las criticas habían detenido a la gente en su intento por realizarse un tatuaje. Ahora, la sociedad se ha vuelto más permisiva y ya no se ve con malos ojos a quienes han decidido decorar su piel con tinta.
Justo esa tolerancia y respeto ha motivado que más personas se animen a realizarse uno, incluso personas mayores, independientemente de los jóvenes quienes son los que más lo hacen. Incluso hasta tiene su día para celebrarse: cada 17 de julio, cuando se conmemora el Día Internacional del Tatuaje.
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Si bien, actualmente ya se pueden eliminarse de la piel, a través de tratamientos como el uso de láser, la idea es mantener tu tatuaje de por vida, por ello, la decisión de hacerse uno no debe tomarse a la ligera y debe estar bien pensado para no arrepentirse tiempo después.
Tu primera vez
Siempre una primera vez, de lo que sea, se queda grabado en nuestra memoria, y en temas de tatuajes con mucha más razón, pues prácticamente vivirá el dibujo plasmado en la piel toda la vida, por ello, es importante que la experiencia sea los más agradable posible y se guarde el mejor recuerdo.
“Es tu piel y va a quedar ahí para siempre. No escatimes en escoger un buen estudio para que tu tatuaje quede cómo lo estás imaginando y que sea una buena experiencia”, señala el artista Javier Gaona, del estudio Infierno Tatuajes.
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Por ello es importante considerar ciertos aspectos, empezando por el dibujo que quieres plasmar sobre tu piel. “Generalmente, lo unimos a algo que resulte significativo, por eso el diseño es muy importante, y aunque podemos encontrar miles de ejemplos en la red, yo siempre recomiendo tomar ideas, pero también darle un toque individual que refleje tu personalidad y para eso te puede ayudar un tatuador experto”, sugiere en entrevista exclusiva para YoSoiTú.
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Como segunda recomendación, está la selección de la parte del cuerpo donde quieras tu primer tatuaje, pues de ello dependerá el tamaño y si deseas que sea visible o no a la vista de los demás, pues hay tatuajes que se hacen solo para que lo vea la propia persona.
De acuerdo con un tabulador del dolor que tienen en el propio estudio de Infierno Tatuajes, la zona menos dolorosa es el brazo y antebrazo. De ahí le siguen los muslos y pantorrillas. En una escala media, se encuentran las costillas. De ahí le siguen la espalda y pecho. Por último, de los sitios donde más incomodad se puede llegar a sentir están los pies, manos y lugares cerca de los huesos. Es justo es estos últimos lugares que se recomiendan los tatuajes sencillos, muy minimalistas.
En cuanto al tema del sitio, lo ideal es elegir un estudio certificado, “que tenga todos los permisos de la Secretaría de Salud y la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), de lo contrario, es difícil garantizar que los procesos de higiene y cuidados sean los adecuados. Además, un estudio va a ofrecerte garantía”, explica Javier.
El artista, el lienzo y las musas
Para Javier, la selección de artista resulta decisivo a la hora de acudir al estudio pues, aunque sean profesionistas, lo recomendable es elegir siempre al tatuador que esté especializado en el estilo y técnica que estemos buscando.
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“Puede ser bueno, pero a lo mejor su área de experiencia es otra y no necesariamente puede ejecutar tu tatuaje a la perfección, por eso revisa su trabajo antes. Si es posible ten una cita antes de tu tatuaje donde puedas conocerlo y te asegures de que entiende que es lo que estás pensando hacerte y cómo lo quieres”, aconseja el profesionista. Además, en este primer encuentro valorarás qué tan a gusto te sientes, si la comunicación fluye y si te sientes seguro de ponerte en sus manos. “Y di no a los famoseados”, recomienda el propio Javier.
El primer de muchos
Todos los que se inician en el mundo del tatuaje lo hacen a través de un diseño que tenga un significado especial, relacionado a la familia, amistades, la pareja o elementos a los que se sienten atracción, como las estrellas, los viajes o una fecha importante, por ejemplo; por ello, es importante valorar con cuál te vas a iniciar, dónde lo quieres llevar y el costo de la inversión.
“Si es muy barato, puede que el tatuador no tenga mucha experiencia o sus materiales no sean los más adecuados. Si es muy caro, cuidado. En el precio del tatuaje entran muchos factores, desde la experiencia del tatuador, su expertise, el tiempo que va a dedicar a tu diseño, el estudio en el que estás, que las instalaciones sean cómodas y adecuadas, y muy importante que los materiales sean de primera calidad”, aconseja Gaona sobre lo que debes valorar antes de agendar una cita.
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De la moda, lo que te acomoda
Aunque actualmente existen una gran variedad de estilos y técnicas de tatuaje, las que hoy en día está imperando son “black work, que es una corriente fuerte y atractiva, porque son tatuajes que perduran muy bien en la piel, además, del tatuaje geométrico y minimalista”, comparte Javier, quien se ha especializado en los tatuajes en free hand, una técnica selectiva, pues está basada en la experiencia del artista.
“La mayoría de diseños que yo hago son así, dibujo en la piel con una pluma pactando con el cliente previamente por dónde va el concepto de su tatuaje, el tamaño y detalles que quiere representar. Hay tatuadores que hacen este tipo de diseños, todo tiene que ver con la experiencia y formación en dibujo”, señala.
La recuperación
De 8 a 15 días es el tiempo promedio que una persona puede valorar el resultado final de su tatuaje. “Es normal que emane un poco de sangre y tinta durante las primeras horas. Después se hará una delgada costra sobre el tatuaje, posteriormente se caerá y saldrá la piel que cubre tu tatuaje”, explica, incluso en este periodo se puede llegar a presentar comenzó, pero es normal.
En cuanto al trabajo final, advierte que, si el tatuaje fue bien hecho, "las líneas deben estar bien definidas y uniformes, mientras que los colores o rellenos no deben presentar huecos”, explica sobre las condiciones finales del trabajo realizado en el estudio.