El mejor antídoto contra el estrés de vivir en una ciudad complicada, del trabajo y los problemas cotidianos es que tu casa sea, o se convierta, en un remanso de paz. Tu hogar debe ser un verdadero refugio donde puedas olvidarte de las tensiones y de todo lo que te "acelera".
Piensa en tu casa un poco como en un templo, donde solo debe reinar la paz y la armonía, un lugar donde meditar y recuperar el ritmo de tu respiración y la calma.
(FOTO TOMADA DE PXHERE)
Crear el espacio ideal
Lo primero que debes hacer es buscar una esencia que te ayude a relajarte; los "perfumes" para la casa están súper de moda. Busca aromatizar tu hogar con lavanda, bergamota y otros cítricos, romero, ylang ylang, manzana verde, jazmín o geranio y combinaciones de éstos.
Otra opción es quemar incienso con tu aroma favorito, su aroma ahumado te remitirá enseguida a un espacio armónico y en paz.
(FOTO TOMADA DE PIXABAY)
Los cristales
Algunos místicos aseguran que las ondas que emiten los aparatos que tienen internet como los celulares, las computadoras personales o de escritorio, la televisión y otros electrodomésticos de última generación; así como las que emiten todos los aparatos electrónicos, disrumpen la armonía de la casa.
De acuerdo con ellos, los cuarzos absorben estas vibraciones, así que pon algunos cerca de donde está tu computadora y de donde conectas tu teléfono a cargar por las noches, por ejemplo. Checa donde están estos aparatos en tu casa y coloca tus cuarzos cerca --o en las habitaciones donde pasas mucho tiempo-- de forma que armonicen con el resto de tu decoración.
(FOTO TOMADA DE PXHERE)
Otras piedras
Es importante que sepas que los colores de las piedras influyen en la forma en la que te ayudarán. Las piedras de tonos rojizos, por ejemplo, tienen propiedades energizantes y te ayudan a ponerte en acción, mientras que las verdes, te tranquilizan.
(FOTO TOMADA DE NETAPORTER)
En cada habitación
Los cuarzos, jades y amatistas son los cristales ideales para la recámara, ya que por sus propiedades favorecen el descanso y la paz. Mientras que para el baño se recomiendan cianita o cuarzo ahumado, que ayudará a convertir tu baño en un delicioso spa, el lugar ideal para reponer fuerzas.
La entrada de la casa es un lugar para dar la bienvenida a quien quiera que llegue a tu casa, pero al mismo tiempo hay que proteger tu espacio de las malas vibras y las presencias poco gratas, por lo que hay que colocar esferas o pirámides de jade, así como piedras talladas. La turmalina negra, por ejemplo, ayuda a disipar la energía negativa.
En la sala, que es punto de reunión, puedes poner sodalita, que estimula la mente y es buena para la percepción y la autoconciencia, además de cuarzos transparentes, citrino o apofilita, ideales para promover la unión.
Finalmente, en la cocina puedes colocar cornalinas, piedras solares o calcita, que ayudan a crear un espacio en calma y a la vez conectado con la tierra.
Con esto tienes cubiertos todos los frentes y las áreas de tu casa. De acuerdo con los expertos, no es recomendable mezclar en el mismo espacio más tres tipos de piedras, para evitar interferencias energéticas, así que escógelas con cuidado, según lo que necesites.