Después de un día cansado, no hay nada más reconfortante que bañarse con agua caliente, pero debes tener cuidado de no hacerlo tan frecuentemente, especialmente en época de invierno, ya que investigadores descubrieron que puede aumentar el riesgo de paro cardiaco.
Este efecto es mucho más común en personas mayores de 40 años, de acuerdo a investigadores en Japón.
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Consecuencias de bañarse con agua caliente
Según un estudio publicado en la revista especializada Resuscitation Journal, el riesgo de paro cardiaco se multiplica hasta por 10 cuando nos sumergimos en agua caliente, especialmente cuando hace frío.
La razón es que bañarse con agua caliente durante mucho tiempo y luego salir a la temperatura ambiente, puede causar un cambio súbito en la temperatura corporal, lo que desencadena una caída brusca de la presión arterial y arritmias cardiacas.
Cuando el sistema circulatorio se ve en la necesidad de gestionar temperaturas muy altas, los vasos sanguíneos se dilatan, la resistencia que ofrecen a la sangre baja y la presión cae drásticamente.
Esto puede causar mareos e incluso desmayos, además de sensación de fatiga e intensos dolores de cabeza.
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Aunque no nos demos cuenta, el cuerpo también suda mucho con los baños de agua caliente, por lo que perdemos líquido en abundancia.
Arritmias cardiacas por agua caliente
El corazón cuenta con un sistema especializado para controlar el ritmo de los latidos cardiacos, pero cuando estos sufren una alteración, causan arritmias, que es el cambio en el latido normal del corazón.
Existen muchos tipos de arritmias, en algunas el corazón puede latir más lento de lo normal o mucho más rápido. En casos graves puede dejar de latir.
Cuando se da este último caso, el corazón se detiene y produce un paro cardiaco súbito.
Sentir un dolor o presión en el pecho es uno de los síntomas de ataque cardiaco, además de dolor en los brazos, espalda, cuello o mandíbula, falta de aliento, náuseas y sudor frío.
Las personas más propensas a sufrir daños por bañarse con agua caliente cuando hace frío son las personas mayores de 40 años.
Se debe recibir atención médica de inmediato en caso de presentar síntomas, ya que un paro cardiaco puede ser mortal.
No estamos diciendo que los baños de agua caliente sean malos, simplemente no lo hagas con tanta frecuencia y evítalos si hace mucho frío.
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