Main logo

Perros beagle, víctimas de la experimentación

Su buen comportamiento, tamaño, rasgos físicos y temperamento dócil, ha llevado a los perros beagle a ser la raza preferida en los laboratorios del mundo

Escrito en MASCOTAS el

Su buen comportamiento, tamaño, rasgos físicos y temperamento dócil, ha llevado a los perros beagle a ser la raza preferida en los laboratorios del mundo, convirtiéndose en las víctimas perfectas de la experimentación animal.

Cada año son usados casi 60 mil perros en investigaciones, pruebas y prácticas en Estados Unidos, y la gran mayoría de ellos son beagles. Por tal motivo, en Beagle Freedom Project intentan rescatarlos y crear conciencia social sobre la triste vida que les espera a estos canes de laboratorio.

FOTO: TWITTER

Perros beagle, víctimas de la experimentación

Recientemente la Universidad de Barcelona contrató a Vivotecnia, una empresa envuelta en polémicas de maltrato animal, con la finalidad de que desarrolle un fármaco antifibrótico para tratar la fibrosis hepática y la mielofibrosis, y según la normativa europea antes de probar el tratamiento en humanos es “obligatorio” hacer el estudio de toxicidad en dos especies de mamíferos, una sería los roedores y la otra los perros beagle.

Los seis primeros canes que participarán en el ensayo para probar el nuevo fármaco no serán sacrificados y serán dados en adopción, pero en la segunda fase del estudio será necesario hacer necropsias al resto de los perros para que estudien sus tejidos antes de iniciar el ensayo con personas.

“La práctica con animales es por ahora insustituible a efectos de garantizar el progreso científico. Las universidades e instituciones púbicas están comprometidas a continuar trabajando para buscar alternativas a la experimentación con animales”, señaló Vivotecnia.

El estudio farmacológico en el que se tiene previsto sean sacrificados 32 perros beagle está programado para el mes de marzo y que tendrá lugar en las instalaciones de la empresa Vivotecnia.

FOTO: EFE

Firmas contra el sacrificio de perros beagle

Hasta el momento ya van un millón de firmas en la plataforma Change.org para evitar el sacrificio de 32 perros beagle por parte de los laboratorios Vivotecnia, que se llevará a cabo en Madrid, donde está ubicada dicha empresa. Los encargados de esta iniciativa son Rubén García y Cristina Espinach.      

En el texto para pedir el apoyo se afirma que los perros beagle se utilizan en la experimentación porque son “manejables, dóciles, nunca muerden y son excelentes compañeros de vida”, porque se aprovechan de su bondad.

Según el texto de la petición, los perros “en estos momentos están sometidos a ingerir dosis únicas de un fármaco durante 28 días, encerrados en jaulas, enfermando cada día más y más”.

MULTAN A FUTBOLISTA POR PATEAR Y ABOFETAR A SU GATO

¿Por qué se utilizan beagles, y no otras razas en experimentos?

Porque son las razas de perros preferidas para experimentos por su buen comportamiento, tamaño y otros rasgos físicos, así como por su temperamento dócil, las mismas características que hacen que los perros beagle sean excelentes compañeros y miembros de una familia, pero que también los convierte en víctimas de la experimentación animal.

FOTO: PEXELS

Primeros beagles usados en experimentos

La primera institución del mundo que tomó la decisión de experimentar, específicamente con beagles, fue la Universidad de Utah. Los primeros ocho beagles fueron comprados por la universidad, el 3 de abril de 1951 a A. Clyde Clark, criador de perros de Weston, en West Virginia, que era miembro del West Fork Beagle Club.

Otros beagles fueron comprados a diversos criadores pequeños ubicados en la zona de Salt Lake City. Para el primero de marzo de 1952, la universidad había comprado un total de 61 beagles para criar, y su programa de cría comenzó de inmediato, haciendo que las perras quedaran embarazadas en su primer celo, y el personal de laboratorio practicaba cesáreas tan pronto como los beagles todavía estaban dentro del útero para que pudieran sobrevivir.

FOTO: TWITTER

Criaron perros beagles

Lo anterior permitía que las perras quedaran embarazadas rápidamente, con la finalidad de obtener la mayor producción de cachorros. Así, para junio de 1953, la colonia ascendía a 175 beagles. En 1955 ya había 309 en un espacio que había sido diseñado para albergar máximo a 200 perros, por lo que este hacinamiento, los llevó a reducir gastos y los perros eran alimentados con carne de caballo.

Para 1960 ya habían criado más de 671 cachorros, que eran hijos de 32 parejas de beagle, para ser empleados en los letales experimentos de toxicidad radioactiva. Los perros de la Universidad de Utah estaban siendo empleados para hacer pruebas, las cuales eran financiadas por una comisión de energía atómica conocida como “The beagle Project”. A todos los beagles se les inyectó plutonio, un radionucléido altamente tóxico.

FOTO: TWITTER

Consecuencias de los experimentos con beagles

Algunos beagles fueron inyectados con dosis altamente tóxicas, y se dejó que padecieran los dolorosos efectos de envenenamiento por radiación sin anestesia, tumores de huesos, terribles desfiguraciones del esqueleto, pérdida de dientes y fracturas espontáneas, fueron algunos de los efectos más frecuentes observados en los perros que recibieron altas dosis; mientras que los beagles que recibieron la dosis más alta de radiación tenían una media de más de 20 fracturas cada uno. Las fracturas se daban en cualquier parte del cuerpo del perro como en la mandíbula, pómulo, costillas, patas o espina dorsal.

FOTO: IG rvbengarcia

No se les concedió la eutanasia a los beagle

Debido a que los experimentadores estaban principalmente interesados en saber cómo la exposición a sustancias radioactivas podía afectar a la esperanza de vida, a los perros que estaban sufriendo no se les concedió la eutanasia. La Universidad de Utah buscó la atención mediática en cuanto se inauguró la colonia de beagles. En 1952, el Salt Lake Tribune publicó una historia favorable titulada “Los perros de Villabeagle”.

En abril de 1956, la historia “Estos perros están realmente calientes” publicada en la revista Mechanix decía lo siguiente: “los amantes de los perros no tienen por qué preocuparse, los experimentos son indoloros; no ha muerto ningún perro”, lo cual era falso, pues ya habían muerto varios perros, y muchos otros, se estaban muriendo.

FOTO: EFE

Se propagaron los experimentos con beagles

Este tipo de experimentos pronto se propagaron a la Universidad de California Davis; al laboratorio Nacional Argonne, en Illinois; el laboratorio Pacific Northwest, en el estado de Washington; el Instituto de Investigación Respiratoria de New México y la Universidad Estatal de Colorado, todos firmando contratos con la Comisión de Energía Atómica para experimentar con beagles.

Más de 100 mil millones de dólares fueron empleados para financiar estas investigaciones, para las cuales mataron a más de 7 mil beagles en experimentos terriblemente dolorosos en los que se inyectaron o los forzaron a inhalar sustancias radioactivas.

FOTO: IG rvbengarcia

El beagle como perro experimental

Pese a que no lograron aportar datos de importancia a la salud humana, este proyecto se extendió durante décadas durante la Guerra Fría, dejando un legado que perdura. Los beagles radioactivos fue la primera vez que seleccionaron a esta raza como el medio para obtener datos en lugar de un animal de compañía, provocando el crecimiento de una enorme industria.

Para 1970, el año en el que se publicó un compendio titulado “El beagle como perro experimental” ya había al menos 56 instalaciones para criar beagles destinados a la industria de la investigación. La gran capacidad de abastecimiento supuso que decenas de miles de beagles podía ser producidos y matados cada año para obtener beneficios.

WHATSAPP… ¿TENDRÁ TERCERA PALOMITA AZUL?