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¿Qué es lo más saludable del menú navideño?

Entre el pavo, la pierna, el bacalao y los romeritos, descubre cuál de ellos es el más nutritivo

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Durante diciembre, específicamente las dos últimas semanas del mes, las cocinas de todos los hogares se perfuman de agradables aromas con motivo de los preparativos de los platillos tradicionales navideños. 

Además de las cenas, tanto de Nochebuena como de Año Nuevo, muchas familias acostumbran a reunirse para preparar dichos platos, por lo que estas reuniones también se vuelven rituales de convivencia, con las que se busca disfrutar al máximo la época navideña. 

Tradicionalmente, son cuatro los platos que se cocinan para estas fechas, empezando por el bacalao, que se prepara a la vizcaína. Otro, es el pavo, que suele ir inyectado, y al que se le agrega su respectivo relleno, y que se cocina al horno. El tercero es la pierna, que suele prepararse enchilada, mechada y horneada. Y, por último, están los tradicionales romeritos, que se cocinan en mole y a los que se les acompaña con tortitas de camarón.  

Si bien, existen más platillos —como pastas, cremas, cuete mechado, costillas, entre otros—, estos cuatro suelen ser los más típicos e icónicos de la temporada. 

Aunque en apariencia los cuatros platillos suelen considerarse nutritivos, hay unos que son más saludables que otros. ¿La razón? Por la manera en la que se cocinan y se combinan con otros ingredientes, lo que provoca que todo lo saludable se pueda llegar a perder al momento de que se guisan, eso sin contar las porciones que se sirven y los recalentados que se dan. 

Bacalao a la vizcaína 

Este platillo es herencia de los españoles. Aunque en la Madre Patria suelen servirlo en lonja, en nuestro país se acostumbra a cocinarse desmenuzado y combinado con una gran canasta de ingredientes, entre ellos el aceite de oliva, ajo, cebolla, cilantro, papas, alcaparras, aceitunas, almendras y chiles largos para acompañar. 

De acuerdo con el sitio My Fitness Pal, una porción de 100 gramos de bacalao a la vizcaína representa un consumo en promedio de 195 calorías, de los que se obtienen 4 gramos de grasa, 3 de carbohidratos y 18 de proteína. 

Si bien no suena peligroso el platillo, todo cambia si consideramos que muy pocas personas suelen quedar conformes con 100 gramos, por lo que muchos se sirven de más o repiten plato, eso sin contar que muchos lo acompañan con una pieza de pan, que va desde un baguette o bolillo. 

Para intentar quemar dicha porción, se sugiere 29 minutos de bicicleta, 19 minutos corriendo o una hora de hacer quehacer. 

 

 

 

Pierna al horno 

De acuerdo con el sitio Top culinario, una porción de 100 gramos de pierna cruda, sin cocinar, cuenta con una composición nutrimental de 65.8 gramos de agua, 19 de proteína y 15.2 de grasas, lo que se traduce en 212 calorías, ¡ojos! sin cocinar, a eso habría que sumarle el resto de ingredientes para su preparación. 

De 212 calorías de una porción cruda de 100 gramos, aumenta a 320 calorías ya cocinada, en la versión adobada al horno, obteniendo 4 gramos de carbohidratos, 18 de grasa y 39 de proteína. 

Una alternativa para consumir una porción de pierna al horno es acompañarla de una ensalada sencilla de hojas crudas, como espinaca, al que se le puede añadir algunas frutas de temporada, nueces y queso, y así conseguir un plato navideño rico, nutritivo y en equilibrio. 

 Foto Pexels

Pavo al horno 

Famoso no solo en las fiestas decembrinas, sino también en las celebraciones de Acción de Gracias, el pavo es de los platos más nutritivos para cenar, ya que se trata de una carne magra y baja en grasa, de ahí que muchos atletas y deportistas la consuman en su dieta habitual. 

Por cada 100 gramos, el pavo ofrece sólo 10.7 kilocalorías, 21.9 gramos de proteína, 2.2 de grasa, 8mg de calcio, 23 de magnesio, 300 de potasio y 150 gramos de fósforo, de ahí que lo convierta en la opción ideal para las cenas decembrinas, incluso en personas con algún padecimiento, como colesterol o con problemas de corazón, pues no les afecta su consumo. Además, de acuerdo con Pavos Parson, “consumir una porción de pavo aumenta el sentimiento de saciedad ayudando con el control de peso”, así que ya no tienes pretexto para cenarlo. 

 Foto Pexels

Romeritos con mole 

Uno de los platillos navideños de origen mexicano son los romeritos con mole, que muchos acompañan con tortitas de camarón. Su origen se remonta a la época del Virreinato. Por si solos, los romeros son fuente de hierro, fibra y vitaminas A y C. 

De acuerdo con el Chef Alfredo Oropeza, el aporte calórico de los romeritos con mole está valuado en 273 kilocalorías, basados en una porción de 100 gramos, que aportarán en promedio de 11.5 gramos de proteína, 2.5 gramos de fibra y 7.8 de lípidos. 

Gracias a que contienen calcio, ayudan al fortalecimiento de huesos y dientes; ayudan a agilizar el sistema digestivo y contrarrestar problemas estomacales, por su alta concentración en fibra; y contribuye en la formación de hemoglobina, gracias a que es fuente de hierro. 

 


 

 

¡Alerta! Exceso de equipaje 

Año tras año, organismos de salud de todo el mundo buscan crear conciencia entre la población para evitar un aumento desmedido de peso durante esta temporada.  

En nuestro país, se ha registrado que, durante la época decembrina, que comprende desde diciembre hasta el 2 de febrero, fecha en la que se conmemora el Día de la Candelaria, una persona puede llegar a aumentar de cuatro a cinco kilos en promedio. 

Este incremento de peso se da por el consumo excesivo de alimentos, principalmente atracones de comida, la poca actividad física y el aumento en el consumo de bebidas alcohólicas y refrescos; por lo que la moderación es la mejor dieta que se puede seguir durante esta época. 

 

 Foto Pexels