Perteneciente al grupo de los cereales, la avena es considerada dentro del selecto grupo de superfoods, como se denomina a ciertos ingredientes o alimentos con alto valor nutricional y que cuentan con propiedades benéficas para el organismo.
Sus granos contienen vitaminas como B1, B2, B3, B6 y E, y minerales como calcio, hierro, magnesio, zinc, potasio y sodio. Posee grandes cantidades de proteína, es rica en grasas sanas, como Omega 6, así como en almidón y fibra, de ahí su popularidad entre los atletas, quienes han encontrado un alimento económico y versátil para preparar sus comidas, que les aporta la energía suficiente para rendir en su entrenamiento.
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Pero no solo los deportistas se ven beneficiados con ella. De acuerdo con la Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, SAGARPA, “la avena es un excelente alimento para los diabéticos, pues tiene un alto contenido de zinc y carbohidratos complejos que ayudan a estabilizar la glicemia y a metabolizar la insulina.
“También ayuda a regular el metabolismo, así como el colesterol, y en lo que a belleza se refiere, fortalece las uñas, reduce la caída del cabello y regenera la piel”, explica el organismo sobre algunas de sus propiedades.
(FOTO DE KEEGAN EVANS PARA PEXELS)
MOTIVOS PARA INCLUIRLA EN TU DIETA
Los beneficios de consumir avena son casi inmediatos. Por tratarse de un alimento perteneciente a los cereales, el aporte de energía es súbito, de ahí que para los deportistas sea el mejor combustible para la hora de entrenar o someter al cuerpo a ejercicio.
Para quienes tienen problemas digestivos, que en nuestro país son muy comunes, contribuye a mejorar la digestión al facilitar el tránsito intestinal, evitando problemas de estreñimiento. En otros temas digestivos, tiene propiedades probióticas que ayudan a estabilizar la flora intestinal, mejorando la probiota y disminuyendo la acidez o reflujo en quien lo padece.
En esta misma línea, se vuelve un gran complemento para aquellas personas que desean bajar de peso, pues controla el apetito y es un buen recurso nutritivo para la saciedad en los momentos de antojo. Además de reducir los niveles de azúcar, ayuda a equilibrar el colesterol y a prevenir enfermedades cardiovasculares.
A nivel celular, la avena tiene propiedades antioxidantes. Su consumo, además, previene el hipertiroidismo.
Para prevenir el cáncer, se recomienda su consumo gracias a que el cereal contiene fitoquímicos que ayudan a reducir hasta en un 10% la posibilidad de padecer cáncer de colon y de mama. Además de proveer de una buena dosis de energía para quienes entrenan, la avena ayuda a mantener huesos y músculos sanos y fuertes.
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CÓMO CONSUMIRLA
Para garantizar recibir todos sus nutrientes, es recomendable adquirirla de manera natural, es decir, los granos no procesados o ya envasados y listos para su venta. La diferencia es que, muchas veces, los empaquetados vienen adicionados con altos niveles de azúcares y otros aditivos que funcionan como conservadores.
Además, el origen de la avena procesada suele venir de campos a los que se les aplican fertilizantes y plaguicidas que alteran sus propiedades. Lo ideal es consumirla lo más natural posible.
Desayunarla tres o cuatro veces por semana es una excelente idea, lo mismo con agua o leche que en hot cakes o muffins, de preferencia sin azúcar o con poco dulce o, aun como un platillo ligero para cenar.