Un niño de ocho años que jugaba en su bicicleta se cayó encima de ella, ocasionando una herida que al paso de los días lo llevó a la muerte debido a una bacteria carnívora.
De acuerdo a El Debate, los padres de Liam Flanagan contaron a una revista estadunidense que el 13 de enero el niño estaba jugando en su bicicleta al frente de su casa, en Oregon. En determinado momento, el menor se cayó y el manubrio se le enterró en un muslo cortando sus jeans y haciéndole una profunda herida.
De inmediato, fue llevado a urgencias, donde le hicieron siete puntadas y dado de alta ese mismo día.
Su madre, contó que aunque el niño se quejaba de que la herida era dolorosa, no le recetaron antibióticos y lo mandaron para su casa.
Ya en su hogar el niño, siguió molesto por los dolores, “decía que le dolía, pero fue su primer accidente, nunca antes le habían puesto puntadas”.
“Yo creo que no se quejó más de lo que se queja un niño al que le han hecho un par de puntadas, narró Sara Hebard, madre del niño.
Asimismo aseguró que Liam era muy dulce y siempre hacía sonreír a todos.
Por su parte el padrastro del niño, Scott Hinkle, le dio Tylenol durante los tres días siguientes, pero los dolores no cesaron.
Fue entonces que le revisaron la herida y notaron que la piel presentaba una extraña decoloración, “mi esposo se asustó muchísimo”.
De inmediato dijo que Liam tenía gangrena y que teníamos que llevarlo a urgencias y para allá fuimos, detalló Hebard.
Esta vez, el niño fue llevado en helicóptero al hospital pediátrico de Doernbecher, en Portland, donde fue sometido a una serie de cirugías y amputaciones para tratar de detener la infección que continuaba avanzando.
Cabe señalar que la bacteria carnívora ocurre en casos contados, generalmente entra por una cortada o piquete y se extiende por la piel matando el tejido blando.
Es una infección tratable si se interviene oportuna y prontamente con antibióticos y en algunos casos, amputaciones del cuerpo.
Le estaban dando todo lo que podían, pero seguían cortando y esperando. Cortando y esperando, resaltó la madre sobre los últimos días de vida del niño.
Al paso de los días los dolores fueron tan insoportables, que Liam fue transportado a un segundo hospital donde finalmente fue puesto en coma médico.
El niño lamentablemente fue desconectado el 21 de enero, ahora sus padres quieren que su fallecimiento no sea en vano.
Aunque esta es mi peor pesadilla, quiero creer que su muerte fue por una razón, quizá sea para salvar otras vidas, anunció su madre.
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